jueves, 15 de noviembre de 2012

Oneshot: Narcisista artificial.

Este oneshot lo hice para mi ex. ¡Hola Voldy!, si estás viendo esto (lo dudo). En fin, les explicaré más o menos lo que ella pensó. Mi querida Voldy quería un fic donde Tom estuviera con Tom, pero bueno, a mí me gusta el twincest, y lastimosamente también me gustan las mujeres, por lo que le hice caso. Aunque sin dejar del lado el twincest, ya entenderán porqué. El título es el mismo al de una canción de PXNDX pero no me gusta esa banda XD. Solo que me pareció correcto, ya que este es un narcisista incompleto.

Título: Narcisista artificial
Autora: Kasomicu
Resumen: Es posible amar a tu reflejo, y si este no lo es más con mucha más razón.
Advertencia: Narcisismo y frotismo. Ah, e incesto.


—Se ven bien —dijo admirando sus trenzas recién hechas.
—Sí, se ven estupendas —secundó el otro que era idéntico (realmente idéntico) a él.
—Duh, no lo preguntaba, lo afirmaba.

El moreno rió y negó con la cabeza. —Modestia, ¿qué es eso?

—Exacto —asintió Tom.
—Y bueno, ¿ahora a dónde vamos? —preguntó el otro Tom.
—No lo sé. ¿A dónde quieres ir?
—¿Piensas lo mismo que yo?
—¡Zapatillas! No sabes, vi unas geniales, como para correr, y también otras para escalar que me encantaron. Y sé que te enamorarás al verlas —aseveró Tom.
—Ojalá sean tan buenas como las describes, aunque conociendo tus gustos sé que las adoraré. —Salieron del todo de la peluquería y se dirigieron a la segunda planta para ir a la tienda de calzados.


Habían salido desde temprano, les encantaba pasar tiempo juntos, ya que no solo eran iguales físicamente sino también en cuestión de gustos y carácter, y si bien para algunos aquellos significaría que chocasen de alguna u otra forma, ellos se la pasaban genial. Era como tener al ser más perfecto del mundo al lado, Tom sabía que era narcisista, y eso solo le aumentaba el morbo a la relación que tenía con el otro Tom. 
Básicamente se resumía a ello, una relación por el físico, lo demás eran gollerías del asunto, como que comprasen lo mismo y disfrutasen de ir a los mismos lugares.

—Son cómodas, prácticas y lucen genial. Me las llevo —le dijo Tom al dependiente de la zapatería, el chico aún anonado frente a la presencia de los jóvenes idénticos asintió como autómata y se llevó las zapatillas.
—¿Y de aquí a dónde vamos?
—Ya pareces loro repitiéndome la misma pregunta, sé paciente, aunque sé que te gustará —le movió las cejas seductoramente y Tom sonrió.
—Ok, sorpresas.


La sorpresa no iba más allá de un baño en la tina compartido y champagne. Pero esos detalles eran esenciales puesto que a Tom le encantasen, cosas simples como esas, algo que ambos disfrutaban y que después de que la copa cayera estrepitosamente al piso terminara en ambos saliendo de la tina a pasos torpes y con las toallas mal ajustadas a sus cinturas buscando no pisar los trozos de cristal.

—¿Qué se supone que estamos haciendo? —dijo Tom entre risas mientras era tomado por la espalda.
—Estamos jugando, uhmn —susurró contra la piel del contrario consiguiendo que se erizase.
—¿A qué jugamos? —preguntó con la voz más grave, sintiéndose ofuscado por el deseo que iba recorriéndole el vientre.
—No lo sé con exactitud, iremos descubriéndolo en el camino —respondió Tom para lanzar a su igual a la cama y quitarse la toalla presuroso, dejando al descubierto su miembro rojizo y henchido de sangre.
—¿Es mi turno? —masculló Tom mirándolo con lascivia mientras se tocaba su erección por sobre la toalla.
—¿Esperarás invitación alguna? —mencionó el moreno. Los ojos de Tom brillaron en señal de picardía y con una sonrisa que señalaba lo mismo se quitó la toalla y la lanzó.
 —Ven —le llamó y cuando lo tuvo cerca asió del cuello para luego comenzar a besarlo.

Sabía cómo rozar sus labios, sabía con precisión cómo tocarle, sus cuerpos eran idénticos, sus rostros igual; cada cicatriz, cada recoveco. El sabor de sus lenguas, incluso aquello era igual. La sensación que le embargaba a Tom era como masturbarse, pero a niveles estratosféricos, como una máxima masturbación, una apreciación de su cuerpo a otro estrato, donde otras manos (que en sí no eran otras porque de ajeno no tienen nada) le provocasen placer, otros labios que son sus labios al mismo tiempo le besasen y le estimulasen hasta hacer su cabeza explotar de solo pensarlo.

—Eres hermoso —dijo un Tom.
—Tú también.

Comenzaron a empujar contra sí, haciendo chocar sus cuerpos en sincronización para obtener un placer inesperado gracias a la fricción. Ambos sudorosos armando un cuadro que a Tom se le hacía excitante y deseaba que hubiesen espejos para apreciarlo desde todos los ángulos.

Siguieron meciéndose, en aquella danza sensual que los acercaba al cielo, al cual sentían bajo las yemas de sus dedos. Ambos querían gritar, desfogarse de toda esa tensión existente en ese instante. Pronto iría a pasar los retorcijones en su vientre se lo avisaban, el sentir apretados sus testículos también. Sus dedos de sus pies se estiraron y la esencia blanquecina dio su aparición entre sus cuerpos.

—Mierda.
—Sí, mierda. Necesito fumar.
—Me traes un cigarro a mí también —pidió Tom. Su igual asintió y se sentó en la cama comenzando a rebuscar en el cajón de la mesilla. A Tom se le ocurrió cerrar los ojos para descansar un poco pero una pesadez lo invadió al punto de no poder volver a abrirlos—. Ough. —Cuando lo consiguió el ambiente era otro pero seguía desnudo, podía sentir el sol de la mañana alumbrarle y unos fuertes brazos abrazándole en un gesto protector.

Miró al rostro del dueño de los brazos. El rubio que roncaba y tenía legañas y barba incipiente. Bill. Su Bill de todas formas.

Había sido un sueño. El pecado culposo de Tom es que era narcisista, a veces demasiado y como si no fuese suficiente prueba el hecho de que se acostase con su gemelo, porque lo de ellos no era algo físico aunque no habría porqué mentir, también formaba parte importante de su relación, también tenía esa clase de sueños, en los que en un mundo paralelo existía otro Tom y era su amante.

Rió ante la idea y abrazó a Bill, no estando dispuesto a dejar esa cama así se hubiese despertado, porque si bien disfrutaba de sus sueños, adoraba su realidad más que a nada.
  



2 comentarios:

  1. o.o
    Esto fue...¡Genial! me imaginé a Tom con Tom(?
    xdd,me gustó mucho,es super :D wiiiiii -corré emocionada-,ahora sí puedo comentar:D ¡no más lectora fantasma!

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  2. Imaginándome a Tom con Tom... algo distinto, pero me gustó xD
    La escena me recordó al video Sober de Pink, donde ella está sobre una cama y con una chica que es ella misma.
    :megusta:

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