Ah, otro tema. Aquí se menciona la "respiración a cuatro tiempos", es una técnica que te enseñan los psicólogos para relajarte, estés enojada, ansiosa, o algo así. Consiste en inhalar aire por cuatro segundos, luego retener el aire por cuatro segundos, después exhalar el aire por la misma cantidad de tiempo y de ahí hacerlo de nuevo. Se llama así porque son cuatro pasos, y dura cada uno cuatro segundos. Funciona, en serio, pero debes practicarlo como un mes para que te haga más efecto, así todos los días si quiera una vez.
En fin, les dejo el capi :3
Capítulo 6: Días malos y buenas noches.
Habían días buenos y malos en la vida de Billie. Los
buenos eran cuando Billie podía respirar el aire fresco, y si bien no siempre
sonreír, al menos podía pasar un buen rato entre sus canciones y las historias
que escribía.
Los días malos eran diferentes, eran aquellos en
donde Billie no era Billie, sino era un monigote andante, uno que no percibía
su entorno, uno que no podía disfrutar; en esos momentos ella no respiraba con
normalidad, era alguien muy frágil, era como si estuviera rota, como si no
pudiera pensar, pero sí lo hacía, claro que sí, aunque todo fuera irreal para
Billie, podía pensar, recordar, sentir, sufrir.
“No voy a dejar que me afecte”, cavilaba mientras su
madre la sacudía para sacarla de ese estado.
Billie no podía gritar. Todo era falso, su voz, no
tenía nada. Podía percibir un leve dolor casi inexistente en su cabeza, podrían
quemarla viva y aun así, Billie no podría sentirlo por completo.
Por más que ella intentaba centrarse, toda su
atención estaba en el ventilador de su techo, en cómo daba vueltas haciendo que
las motas de polvo danzasen frente a Billie, y la morena sonreía y tarareaba en
su mente una melodía acorde.
¿Quién recogería sus pedazos? Nadie podía hacer nada
por ella en los días malos.
El lado cuerdo se iba extinguiendo, y Billie no lo
notaba. Porque ese lado no era real, como todo, era algo utópico.
Trina lloraba con fuerza, le gritaba, seguía
zarandeándola, pero Billie no veía con sus ojos.
Ciega, sin voz, sin fuerza, sin cabeza, en parte
muerta, no, Billie no estaba muerta, estaba solo “no viva”.
La música que estaba en su cabeza dejó de sonar.
¿Qué la había detenido? Un ángel. Billie veía uno en la ventana, era rubio y
sin alas, quizá se habría caído del cielo, ¿entonces lo que decía su madre era
cierto? Siguió viendo cómo el ángel le observaba… ¿acongojado? ¿Triste? ¿Y
dónde estaba su túnica?
No era un ángel, era… su musa. Tomie, su sirena.
¿Qué hacía allí desnuda en la ventana? Su madre podría verla. Parpadeó, y pudo
sentir su cuerpo por fin, sus miembros adormecidos y su cabeza que iba
perdiendo el sopor al que estaba sometida cuando eran los días malos.
—¿Billie? —llamó su madre al ver que la morena
parpadeaba y se movía, Trina estaba esperanzada, su hija volvía en sí.
Billie intentaba hablar, pero sentía la garganta
apretada.
—No te esfuerces, Billie —pidió su progenitora, con
una sonrisa en los labios. Pero la menor quería hacer que Trina le prestase
atención y no se fijase en…
Cuando miró en dirección a la ventana, su musa había
desaparecido.
—¿Tomie? —fue lo primero que dijo, y lo sintió como
si fuese la primera vez que paladeó ese nombre en su boca. Lo sintió en la
lengua, en la garganta, reptó por su pecho y se anidó ahí.
O tal vez ya llevaba ahí un tiempo antes. Incluso mucho
antes de saber cuál era su nombre, conocer su nombre, existía.
—¿Cariño? ¿Quién es Tomie? ¿Un chico con el que
soñaste? —preguntó extrañada Trina, pero no demasiado, lo importante es que su
hija estaba con ella. No interesaba si había soñado con un muchacho, aunque era
raro aquello dado que bueno, normalmente Billie tenía mujeres en su cabeza.
—Nada, nada —dijo Billie, aclarándose la voz para
que sonase como una suya. Se sentía ligeramente mareada, ¿habría sido obra de
su imaginación? Ella recordaba claramente haberla visto, y lo de ayer también
tenía que haber sido real. Tenía que creer que sí.
—¿Quieres que te dé tus pastillas? ¿Cómo te sientes?
¿Quieres algo? —cuestionó Trina un tanto ansiosa, se alegraba de que su
unigénita estuviese consciente, sin embargo, también sabía que podía recaer de
un momento a otro, cosa que quería evitar.
—Supongo que debo tomarlas. Estoy… estable. Ahora
quisiera estar sola, mamá.
—Sabes que no puedo dejarte sola justo ahora, Billie
—sentenció Trina y Billie cedió, porque no sería justo para su madre,
probablemente tampoco se lo perdonaría a sí misma si le daba otra crisis.
~
No fue sino hasta la noche en que Trina, extenuada
por el día largo que había tenido, se había ido a dormir.
Pero Billie sabía que
su sueño era ligero, que si ella se ponía mal y gritaba, Trina se iba a
despertar como un resorte.
Al menos durante el día había dormido, y cuando
sintió ganas de rascarse hasta lacerarse la piel, se aferró a su madre e hizo
la respiración de los cuatro tiempos hasta que se sintió relativamente mejor.
Sin embargo, ahora tenía que verla, tenía que
hacerlo, porque debía convencerse que era real, que no era su jodida
imaginación. Porque el corazón de Billie no soportaría que su musa fuera otro
de esos personajes ficticios que su maldita mente creaba, los cuales la
acompañaban cuando estaba sola, los que cuando uno es pequeño los llaman “amigos
imaginarios”.
Así que se colocó su chaqueta y salió en dirección
al mar.
Cuando se estaba en la orilla, palpó con sus dedos
la arena húmeda, permitió que el aroma nocturno del agua se fundiera con el
aire que respiraba y dejó que inundase sus pulmones, porque la hacía más real.
Porque
Tomie era del mar, y Billie de la tierra, entonces aquella agua oscura era como
Tomie, simbolizaba a Tomie.
Solo la había visto una vez pero ya la necesitaba,
porque Billie era egoísta, siempre lo era.
Y cuando su mente iba desconectándose de su cuerpo,
desde las profundidades, salió Tomie, con su aleta de pez y sus pechos al aire.
La rubia le sonrió, y Billie bajó de las nubes, o quizá se instaló ahí.
—Eres real —afirmó, más para sí misma.
—¿No tuvimos esta conversación antes? —preguntó sin
moverse de la orilla, mirándola curiosa.
Billie se acercó a ella y le plantó un beso, uno
mojado, porque Tomie lo estaba, uno que sabía a sal marina, y algo dulce que no
pudo discernir, uno que se sentía suave, como sus pechos chocando contra los
suyos, uno que era correspondido y muy entusiasta, aunque algo torpe.
—¿Qué fue eso? —cuestionó Tomie cuando se separaron.
Y Billie recordó que ella no era humana y se sonrojó.
—Un beso —respondió. No sabiendo qué hacer ahora, le
había robado su primer beso a alguien que no era de su mundo.
—Fue rico, ¿lo hacemos de nuevo? —interrogó Tomie
con los ojos brillantes. Billie asintió, pero recordó algo más.
—Podemos hacerlo las veces quieras, aunque… no sé si
esté bien. ¿Fuiste a verme temprano?
—Sí, te vi mal y me fui. No quería que tu madre me
viera, al menos te recuperaste —soltó convencida.
—Oh… ¿por qué no te has transformado?
—Puedo hacerlo, pero ya que viniste aquí, ¿no te
gustaría ver donde vivo? —Tomie la sujetó por las manos y observó expectante, y
sonriente, Billie simplemente no podía negarse, así fuera comida por un tiburón
o muriera por falta de aire.
—Bueno…
Bastó eso para que la de rastas la jalara contra
ella y se hundiesen en el mar.
AHHHHHHH!!!!!!!!!! por fin por fin!!!!!!! ya quería leer más de esto ufffff es que es tan diferente a todo lo que he leído antes, me deja sensaciones muy lindas...
ResponderEliminarHummm Billie wuou no sé que se siente desconectarse así tan feo pero bueno, espero que poco a poco Tomie la haga salir de ese estado...
Me encanta la personalidad de Tomie, es tan libre, sin complicaciones...
Y ya le andan robando besos sin saber que son siquiera XDD lol genial es cap esperaré el otro para saber como hace Tomie para que Billie no muera ahogada XDDDDD
ahhh ya extrañaba a Tomie la sirena*w*
ResponderEliminaraw Tomie hizo que Billie saliera de ese estado en el que se encontraba,además Billie la pensó como si fuera un ángel,aunque no lo es,para ella si xD
Billie robando besos a Tomie XDDD y esta sin saber que eran XDDD tan lindas ellas,me pregunto como le va hacer Billie para respirar bajo agua XD ¿comerá una alga? XD (no me copié de barbie fairytopia XD o eso recuerdo que comió)
en fin,espero el siguiente cap :3
saludos y besos~
Que lindo.....solo puedo decir eso...me encantó... :-)
ResponderEliminarAhora esperar el próximo capitulo....
Ufff le robó su primer beso TwT Tan inocente Tomie con su: ¿Lo hacemos de nuevo? Es una monada :3 So guay, ya quiero saber como es el mundo de la sirena... Pero... Como lo hará Billie para no ahogarse? O.o
ResponderEliminarEspero con ansías el proximo *w*
Ah, y lo mismo con el joven hormonal y el Billobear xD Espero con muchas ganas e impaciencia el siguiente :*
Saludos y abrazos playa~
No se publican mis malditos comentarios hijos de su mamá ¬¬. Bleh.
ResponderEliminarQue mal lo que le pasa a Billie :( sentirse así... no puedo ni siquiera imaginarlo, me da escalofríos :S.
El beso fue tan tierno, me dejo toda llena de suspiros y una sonrisa idiota cunado lo leí, en la escuela me miraban raro lol. <3
Tomie es un amor de criatura *-*... epa, ¿se la va a llevar? Que no la regrese *-* okya xD
Muero por ver como es la casa de Tomie *_____*
Besos Nadir, espero estes bien bella :)
nueva lectora askkj me gusto
ResponderEliminarsabes es la primera ves que leo algo tan exitante que ganas de ser billie y hacer mierda todo el cuerpo de tomie XDDD :$$$
ResponderEliminarme encanto por faa publica mas ! escribes hermoso<3
No sé por qué, ni siquiera tiene sentido pero al leer esto las lágrimas solamente cayeron... me siento extraña.
ResponderEliminarYa extrañaba muchísimo leerte, y leer En Lo Profundo, sobre todo desde lo del tatuaje de Bill.
Ya te extraño, marica u.u
Quiero saber qué pasa. Amo el mar, esto será hermoso.
Mi comentario corto, pero bueno. Te quiero, besitos *3*
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEs horrible eso que le pasa a Billie, lo sé porque yo lo he vivido.
ResponderEliminarNo sé si piensas así, pero yo prefiero estar sola cuando pasa eso, me siento peor cuando me agitan o me preguntan cosas y no puedo responderles, me hacen sentir culpable.
Me ha gustado mucho este fic, espero que actualices pronto, catorce y en lo profundo, se agradecería.
Escribes genial, me encanta todo lo que escribes aunque no siempre comente.