THW: El lugar donde todo puede pasar. Cap 4/ Primera parte: "No abras los ojos"

Hola de nuevo. En esta oportunidad les traigo otro capítulo de Tokio Hotel World, en lo que está basado es en una leyenda urbana que leí hace años, no recuerdo en qué web, y evidentemente omití muchas cosas, pero bueno, digamos que es una burla de todas formas. Espero les guste. Nos vemos en el siguiente.

Capítulo 4: No abras los ojos. Primera parte

Tom dormía plácidamente en su cama y sintió que alguien se acomodaba a su lado, luego que lo abrazaban y después que lo jalaban de sus trenzas…y que le llamaban con una voz bajita…

—Tom…Tom.

—¿Uhmn? —él volteó hacia esa figura que lo visitaba de madrugada.

—Tuve una pesadilla, ¿puedo dormir aquí?

—Joder, Bill —se quejó Tom entreabriendo los ojos hacia su hermano.

—Sólo por hoy, prometo no moverme mucho —dijo Bill, y Tom que estaba tan cansado lo dejó allí.

—Pero no me abraces que hace calor —bufó Tom, Bill lo soltó.

—¿Jumbie también puede dormir con nosotros? —preguntó Bill.

—No quiero ningún avión de juguete rozándome el trasero —advirtió Tom y Bill empezó a moverse en la cama logrando así que Tom no pudiera dormir—. ¡Quédate quieto!

—¿Uhmn? —masculló Bill, despertándose.

—Prometiste no moverte.

—Es que no puedo dormir bien sin Jumbie —dijo Bill haciendo morritos, Tom le sujetó una de sus rastas—, ¡ouch!

—Mira, hermanito o te duermes en tu cuarto con tu Jumbie o aquí sin él…y sino haces ninguna de los dos cortaré una de tus extensiones —amenazó Tom sin soltar aún la rasta de Bill.

—Ya, ya, ya. No me muevo y duermo sin Jumbie —dijo Bill y Tom le soltó su rasta.

Después de un rato.

—Tom…Tom…—farfulló Bill, empujando a su hermano al punto de que se cayó al suelo.

—¡Carajo, Bill! —gritó Tom ya despierto.

—Es que, Tom…

—¿Qué?

—Quiero ir al pipiroom.

—¿Ah? —preguntó Tom confundido.

—Quiero hacer pipí.

—¿Y qué quieres que haga?

—Es que me da miedito la oscuridad. —Tom con la intención de querer dormir si quiera un poco le prendió la luz del cuarto, y la del pasadizo que llevaba al baño, luego se metió de nuevo a su cama, apenas se echó sintió que le pasaban una mano por la espalda.

—Joder, Bill, ¿Acaso quieres que te enseñe a orinar?

—No, amor, no soy Bill. —Tom se estremeció al oír la voz de la mujer desconocida, volteó a verla pero ella lo detuvo—. No me mires. —Él no se sentía satisfecho al no verle la cara y volteó igual para mirarla pero no podía verla bien porque apagó la luz del cuarto antes de acostarse—. Te dije que no mirarás.

Pudo visualizar que las uñas se transformaban en garras.

—No, no, no, a mí no me vengas con cosas onda de Sombras de Grey que no me gustan —dijo Tom alejándola de él, lo que provocó que las garras no lo atravesarán a él sino al colchón—. Oye, tú me pagarás el colchón porque es ortopédico.

Tom se volvió a echar y la tipa enfurecida porque no lo pudo matar en un primer momento volvió a sacar las garras dirigiéndolas a Tom…

Bill prendió la luz y dio un grito de terror…